top of page

Sobre los últimos registros con mi padre...

Writer's picture: Cris SosaCris Sosa


¡Saludos, Semillita Estelar!


Anhelo que te encuentres bien.


Te cuento…


Nunca había escrito sobre mi padre en esta vida, quien hace exactamente trece años partió de este plano físico.




Bueno pues, hoy escribo un poco sobre él y los últimos registros que tuve con él.


Comenzando con su partida...


Su partida no fue de la nada. Es decir, no fue un accidente. No obstante, fue una partida traumática e inconsciente.


Partió a pocos meses de cumplir 61 años, joven aún, por hemorragia secundaria de metástasis de cáncer de sistema linfático. Estaba entubado, en una camilla de la UCI del hospital donde fue director médico por muchos años...


Desde el diagnóstico de su enfermedad hasta el día de su partida se cumplieron cinco años.


Recuerdo el día que me dijo el diagnóstico…


Una tarde después de la clínica, durante el inicio del primer semestre de mi último año de odontología.


Llorar fue inmediato.


Pareció una sentencia de muerte…


Me llegaron “flashlights” de dos personas familiares que se habían muerto dolorosamente por cáncer: su prima, bien joven, a sus treinta y pocos años, de cáncer de seno; y la vecina querida que nos cuidaba algunas veces de pequeños y nos regalaba siempre una sonrisa, también de cáncer de seno.


... Teníamos esperanza de que cayera en un estado de completa remisión, CF (cáncer free), después de su primer tratamiento de quimioterapia aún teniendo un pronóstico no muy bueno (pues fue diagnosticado en etapa avanzada).


De hecho, fui yo que le exhorté que hiciera finalmente una biopsia. Había acompañado a mis padres a una convención de neumólogos en Puerto Rico cuando le noté unos nódulos “para afuera” por el área detrás de las orejas. Y cuando me acompañó al estacionamiento a buscar algo en cuestión de pocos minutos estaba completamente empapado de sudor. Su respiración era corta, “esternal” y no “abdominal”, subía los hombros para poder inhalar aire…


Le dije: “¿Papi, que es eso que está ahí atrás de tus orejas? ¿eso no se ve bien? ¿Y porqué estás respirando así?”


Creo que como excelente médico (era médico internista y del pulmón) y sabio, sabía que algo no muy bueno estaba ocurriendo en su cuerpo, pero tenía miedo de saber lo que era con nombre y apellido.


Recuerdo que antes del diagnostico bajaba de San Juan a Humacao para visitar a mis padres casi todos los fines de semana cuando estudiaba en la universidad y no había notado el estado de mi padre con relación a la respiración ni el sudor. Lo que sí había notado en él fue una tos productiva, mayormente en la noche y durante el sueño. Tos que tuvo por algunos años y parecía no tener fin. Y también había notado una dosis baja en la vitamina llamada "alegría de vivir".


… Ya con la enfermedad, mi padre la tomó de manera positiva y buscó la cura a través de lo que él creía y practicaba – una medicina más alopática y una espiritualidad independiente. Tuvo varios tratamientos de quimioterapia y dos transplantes de médula ósea. Aceptó tratamientos de Reiki. Se abrió a recibir constantemente reflexología, masajes con aceites, todos a través de su esposa (mi madre). También modificó su alimentación. Y comenzó a tocar guitarra, algo que siempre quiso hacer.


Mi padre creció. Evolucionó. Y cultivó sus ojos más brillantes. Su cabello más bonito. Su rostro más alegre.


Yo sentía, como intuitiva y empática emocional, muchas cosas a través de él… Un buen día en casa escuchando música le dije: “Debes practicar el perdón hacia tus padres. Eso te dará paz. Eso te dará más vida.” Él me miró desconfiado…


Y yo, desconfiada, continué…


Mi vida tomó un rumbo, más.


Aproximadamente nueve meses antes de mi padre fallecer, el amor tocó a mi puerta sin esperarlo .

¡Y cómo tocó!


La relación no fue tomada de buena manera por mis padres por causa de mi pareja ser mayor que yo. Por ser una relación "40 y 20"...


Meses después mi padre recayó. El cáncer regresó.


Pasé a ser vista (así lo sentí y en un momento fue expresado) como el agente que causó esa “desgracia”, pues mi padre: a) no estaba feliz con mi relación; b) nunca iría aceptar esa unión.


Solo que...


Una semana antes de fallecer, él y yo tuvimos una conversación hermosa sobre EL AMOR.


En la misma, que comenzó en el hospital después de haber asistido por televisión un juego de fútbol de la copa del mundo, me preguntó: “Cristina, ¿tú lo amas?”


- Si papi, lo amo…

- ¿Y él quiere hacer una familia contigo? ¿Tener hijos y eso?

- ¡Sí!

- … Entonces espera yo salir de aquí del hospital para invitarlo a casa, conocerlo, y darnos un lelolai (DonQ con jugo de china, jajaja) juntos. Y si viene a pedir tu mano, pues se la damos.


Sin embargo, salió del hospital y dos días después falleció.


En ese interino, cuando salió del hospital y llegó a la casa, le pregunté: "¿qué Te gustaría cenar?"

Me respondió: "arroz y cornbeef con papas".

Y le hice su arroz y cornbeef con papas, que no quedó como me hubiese gustado, pero aún así se lo saboreó.


Después, mi madre tuvo que salir y me quedé a solas con él.

Me dijo que sus piernas las tenía demasiado pesadas, que no las podía mover, por lo que me pidió Reiki. Y así lo hice. Le di Reiki, en adición a abrazos, masajes y muchos cariñitos... ¡AMOR INCONDICIONAL!


Mientras le daba Reiki me recordé de un pasaje del Libro Tibetano de los Muertos que había leído. Pensé: ¿será que él está en ese estado?


¡Se estaba yendo! ...


Antes de salir le dije que lo amaba y lo vería pronto.

Él siempre me respondía, solo que esa vez no me respondió.


Salí de la casa llorando. Presentí que sería la última vez que vería a mi padre en el plano físico.


Y así fue.


Viajé a New York de vuelta al trabajo. Sin embargo, fue solo pisar la ciudad que…


En la noche sentí una energía entrar en el apartamento y “golpear” mi cama…


Más tarde en la noche recibo aquella llamada que uno nunca espera…


La llamada de la muerte.


Mi padre falleció en la madrugada del martes 06 de julio del 2010. En el hospital.

Estaba mi madre y mi hermano con él. Mi hermana mayor también pasó por allí.

Ellos no tuvieron el privilegio de verlo comer su última comida, feliz. De tener la última conversación con él en alegría y paz...


Mi segunda hermana, que estaba en Chicago, y yo, nos encontramos en el aeropuerto de San Juan para bajar a Humacao al rito fúnebre de mi padre.


A partir de ahí, todo cambió por completo…


¡Sí! Es cierto que todo cambia.

Empero, cambia aún más cuando hay una muerte física traumática que crea un impacto muy fuerte para unos miembros de la familia y para otros no... Cuando uno consigue transmutar la relación antes de la partida y otros no...


Rezo…


Rezo para que se transforme el luto, el dolor, la frustración, el resentimiento y la rabia aún presentes, en AMOR POR LA VIDA Y LA CONTINUIDAD DE LA VIDA.


Y me desapego…


Sé que mi padre está feliz.

Sé que él está sanando allá, así como yo estoy sanando aquí (por cierto, puedo afirmar que mi proceso de sanación espiritual se inició con su partida).

Sé que no está “bounded” en la Tierra.

Sé que bendijo mi unión antes de partir...

Así como bendice todos los días mi camino y el camino de sus nietos que no pudo conocer en el plano físico (10 meses y medio después nació mi primogénito, su primer nieto, y mira que soñaba con ver nietos corriendo por la casa...).


Te entiendo, Papi… Te siento. Te pienso. Te extraño. Te perdono. Te AGRADEZCO todo lo que hiciste por mí, por mis hermanos, por mi madre, por la familia que creaste…


Era exactamente eso lo que tenías que hacer. Era exactamente así que tenías que SER.


Hoy estoy "sin culpa", más libre, con unión dentro de mí.


Eres parte de mí.

Soy parte de ti.

Hoy y siempre.

Gracias.

Por tus cuidados, por tu medicina, por transmitirnos la cultura y amor por Puerto Rico, por los bailes y la música, por Mambrú y el machete...

Por Todo.


Te Amo.



¡La vida continúa, Semillita!


Cuando nos quedamos con algo por resolver… Cuando nos arrepentimos por no haber pasado más tiempo de calidad con nuestros seres queridos, sin abrazarles, sin conversar, sin decir: te amo, puede que el pasaje de la muerte sea mucho más doloroso de lo que es…


Pues es la muerte LIBERACIÓN y continuidad de la VIDA.


Así que, por experiencia de lo que he visto y vivido, no dejes callado ese TE AMO. No dejes callado el PERDÓN. Exprésalo. Abraza y agradece por la vida, por todo, por ser…


¿Ok, Semillita?


Por cierto, antes de terminar este escrito…


¿Sabes que puedes hacerle una lectura de Registros Akáshicos a un ser querido (familiar cercano, padre, madre, hermano, hijo, amigo, etc.) que ha partido del plano físico para, especialmente, ayudarlo a transmutar las energías y para que la transición sea mejor?


Yo lo hice para/por mi padre.


De hecho, en su Registro tenía vigente un voto ancestral de sufrimiento y sacrificio que fue creado hace seis generaciones atrás y que por consiguiente, estaba afectando su descendencia. A través de la limpieza de su Registro, ese voto fue liberado y con él fueron transmutadas las energías de sacrificio y sufrimiento para las próximas generaciones...


Si deseas más información sobre este tipo de lectura para un ser fallecido, no dudes en entrar en contacto conmigo, ¿vale?


Y si estás pasando por usa situación similar, por la situación de vida de tener un ser querido con cáncer, o por la cercanía de partida de un ser querida, sabes que estoy aquí para servir y ser de ayuda en lo que pueda.


Hasta el próximo post, Semillita.


Paz y bien,


~ Cris

 

Cristina, en esta vida, es natural de Puerto Rico. Sin embargo, a nivel del alma, es natural de Sirius... Formada en Ciencias, Odontología, Odontopediatría, y algunas modalidades de sanación, medicina o terapia energética. Es madre de tres niños - dos varones y una niña. Valora la unión, la prevención, la educación, la libertad de expresión, entre otros. Prefiere escribir que hablar. Observadora y reservada, aunque adora subir a una tarima para bailar y cantar. Disfruta del mar y del río para nadar y meditar; de mover con atención su cuerpo para su mente y corazón serenar; de visitar una librería esotérica para leer y estudiar; de jugar con sus hijos y hacerlos reír sin parar; de estar en buena compañía íntima y familiar; y de una deliciosa y nutritiva comida, ¡claro está! Si deseas contactarla, hazlo ahora. En confianza. ¡Ya! ☺︎

Recent Posts

See All

Comments


bottom of page